Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

En lo que respecta al cuidado de nuestra piel es indudable que siempre buscamos lo mejor. Contar con una piel más hidratada es vital ya no solo por el aspecto estético sino también por cuestiones de salud, y es que una piel sana es un reflejo de cómo somos por dentro, de ahí que la cosmética orientada al cuidado de la piel sea tan importante, así como contar con un una rutina facial bien construida en base a nuestro tipo de piel. La hidratación es una de las claves que tenemos que tener en cuenta siempre que planifiquemos nuestro skincare, incluso para las pieles grasas, aunque las personas que cuenten con este tipo de piel crean que es mejor obviar todo aquello que parezca añadir grasa a su rostro. La hidratación sigue siendo uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta en todo proceso cosmético, y nuestra piel nos lo agradecerá.

Es por eso por lo que una de las preguntas más frecuentes dentro de este sector es cuál es el producto más hidrata y por lo tanto el más recomendable, tanto para nuestro rostro como para nuestro cuerpo: el aceite o la crema. Estamos más que acostumbradas a utilizar crema hidratante, pero el aceite es también un aliado perfecto para que nuestra piel se mantenga sana, por lo que en este artículo vamos a indagar sobre cuál de los dos productos tiene mejores propiedades hidratantes y cuál es el más recomendable para nuestro día a día, así como cuándo es preferible utilizar uno u otro. ¡Vamos a ello!

Qué es mejor: aceite o crema hidratante para hidratar la piel

Para empezar tenemos que comprender cuál es la diferencia básica entre la crema hidratante y los aceites para conocer de primera mano por qué uno nos conviene más que el otro: mientras que la crema hidratante está compuesta por una base acuosa y diversos aceites, el aceite, como es de esperar, está compuesto únicamente por diferentes aceites. De este modo, por este motivo, la crema hidratante es capaz de penetrar hacia las capas más profundas de la piel, en tanto que el aceite afecta principalmente a las capas más superficiales.

Tienes que fijarte no obstante en la composición exacta de la crema hidratante por la que vayas a optar, pues hay determinados productos que incluyen alcohol, lo cual puede contribuir a que la piel se reseque y no es lo más adecuado, especialmente si tienes la piel sensible o seca. Así, ¡atiende a lo que compras!

Otra de las principales diferencias entre la crema hidratante y el aceite es su forma de aplicación. En tanto que la crema hidratante siempre debe aplicarse sobre la piel seca a fin de que se absorba mejor, en el caso del aceite es recomendable que se aplique con la piel húmeda, facilitando así que se mezcle con el agua del rostro y se absorba más rápidamente. Además, esto permite que nos sequemos la cara a continuación, una vez haya hecho su efecto, evitando así que el aceite deje esa sensación de pegajosidad que muchas veces se le achaca a este tipo de sustancias. Y en esta misma línea, el funcionamiento y la forma de hidratar de uno y otro producto es también muy diferente: lo que hace la crema hidratante es aportar agua a la piel para rehidratarla, mientras que lo que hace el aceite es crear una barrera protectora que impide que el agua se pierda. Es decir, que mientras un producto aporta hidratación como su principal función, el otro evita que esta se pierda.

Ahora bien, la pregunta del millón: ¿qué hidrata más, el aceite o la crema hidratante?

Según nos han explicado los especialistas de https://academie.es/, un laboratorio cosmético con más de cien años de experiencia en la fabricación de productos para el rostro y el cuerpo, la crema hidratante hidrata más en los términos a los que estamos acostumbrados. Es de esperar teniendo en cuenta las explicaciones que hemos dado con respecto a las diferencias principales entre un producto y otro, pero esto no quiere decir que el aceite no hidrate o que no se deba utilizar. Es cierto que la crema hidratante es un mejor aliado para mantener una piel hidratada, pero la elección por el aceite depende de otros factores como la preferencia de texturas u otras necesidades de la piel.

¿Para qué pieles es mejor la crema hidratante?

Para todas. Como hemos visto en el punto anterior, la crema hidratante es el producto más indicado para hidratar la piel y por lo tanto todas las pieles deben utilizarla, lo importante es que se encuentre un tipo de crema que se adapte al tipo de piel que tenemos. Por ejemplo, las pieles secas y las pieles sensibles necesitan una crema hidratante muy potente precisamente porque tienen tendencia a perder esa hidratación, a resecarse con facilidad e incluso a agrietarse, y en algunos casos se puede enrojecer o alterar si se trata de pieles muy sensibles o con rosácea. Es importante dar con la fórmula perfecta para nuestra piel, y para ello es imprescindible contactar con especialistas que puedan indicarnos qué necesitamos, o incluso probar diferentes productos para ver ante cuál reacciona mejor nuestro tipo de piel.

Ahora bien, existe una duda muy extendida y es si las personas con piel grasa también necesitan crema hidratante. La respuesta, rotunda además, es . Muchas veces a las personas con la piel grasa o mixta se les olvida o prefieren no aplicarse crema hidratante porque tienen la sensación de que no hace más que sumar grasa a una piel ya de por sí brillante y de aspecto oleoso, pero la hidratación es clave en todos los casos y es importante dar con un producto adecuado. De hecho, en estos casos es evidente que los aceites no son la mejor opción, sino que hay que encontrar una crema hidratante con base acuosa y una composición reducida en aceites que contribuya a hidratar la piel sin por ello sumar grasa al rostro.

¿Cuándo es mejor el aceite corporal?

Normalmente, la piel del cuerpo es mucho menos sensible que la piel del rostro, por lo que el uso de aceites corporales es una mejor alternativa en muchas situaciones. Al igual que en el caso del aceite para el rostro, se trata de un producto que debe aplicarse con la piel húmeda, por lo que su aplicación ideal es después de la ducha cuando todavía no nos hemos secado el cuerpo por completo ya que de ese modo favorecemos su absorción y podemos retirar los restos una vez los sequemos por completo, eliminando cualquier sensación molesta o desagradable.

El aceite corporal se puede utilizar en cualquier momento del año y se trata de un muy buen producto para hidratar todo el cuerpo, siempre y cuando tengamos en cuenta que el funcionamiento principal de los aceites cosméticos es el de crear una barrera para impedir que el agua salga, no el de hidratar per se. Aun con todo, contribuirán a que consigamos una piel más cuidada, más suave y con un aspecto más luminoso, por lo que no hay mal momento para incorporarlo. Eso sí, es posible que durante los meses de invierno el aceite corporal sea un mejor aliado que en otras épocas del año, ya que el frío tiende a resecar más la piel, especialmente en aquellas personas que padezcan piel atópica, y la aplicación diaria de aceite corporal puede ser una muy buena forma de lidiar con posibles picores o con la tirantez de la piel clásica de esas fechas.